Y ahora, Estados Unidos
La Selección Mexicana de Futbol sufrió de más ante Costa Rica, al grado de tener que llegar a los penales para poder avanzar a la final de la Nations League de la Concacaf.
Martino hizo algunos experimentos que no le funcionaron y siguieron siendo los que juegan en Europa los que marcan la diferencia. Falta de gol y contundencia son los graves problemas por los que atraviesa este equipo en estos momentos.
México fue superior y tuvo las mejores ocasiones. Algunas de Lozano, de Herrera y otras de Lainez, pero la pelota no entraba.
Éstos son los partidos, los oficiales, los que tiene que ganar México. Todos los moleros los puede perder y hacer lo que quieran con tal de ganar dinero, pero cuando hablamos de oficial tenemos una responsabilidad histórica en esta área de ser los mejores.
Afortunadamente, en la tanda de penales se pudo avanzar para jugar mañana contra Estados Unidos por el título de un torneo que no sirve ni aporta nada.
México vuelve a salir como favorito ante los norteamericanos, que cuentan con un plantel que tiene a todos sus jugadores en Europa, pero que como conjunto no funciona. La selección de Martino no puede perder contra ellos y tiene que coronarse campeón de un torneito intrascendente.
Problema es la falta de gol. Parece increíble que ante la baja de Raúl Jiménez tengamos tantos problemas para estar finos de cara al marco rival. No hay delanteros de calidad como para marcar una diferencia.
Ni Martín ni Pulido ni ningún otro está en este momento en posibilidades de generar confianza.
Por otro lado, en el partido de mañana espero que los paisanos se porten mejor en las tribunas, pues en seis ocasiones le gritaron al portero tico en sus despejes, hasta el grado de que el partido se suspendió.
La Concacaf y la Federación están desesperadas porque pueden emitir sanciones fuertes.
Hoy también juega la Olímpica en una gira de preparación muy interesante que le consiguieron a Jaime Lozano. El partido es en Marbella, contra Rumania, que es uno de los europeos que se ganó su boleto para los Juegos Olímpicos.
Así que seguimos con nuestro verano de locos. Acuérdense de mí porque terminaremos intoxicados de selección, al grado de no querer ver más partidos de ellos hasta la Copa del Mundo.
México le tiene que ganar mañana a Estados Unidos. Siempre le tiene que ganar.