¿Mundial cada dos años?

Pensaba que el futbol sería diferente con la llegada de Infantino a la presidencia de la FIFA. Realmente tenía esperanzas de que hubiera un cambio radical y se dejara de priorizar lo económico para ver los intereses deportivos. Qué equivocado estaba. Blatter reventó el futbol y lo llevó a límites insoportables, haciendo pactos con países sin tradición futbolística que lo único que buscaban era crecer políticamente. Le daba mundiales a quien no debía y aumentaba el número de partidos y participantes a cambio de grandes sumas de dinero.

Ahora el nuevo mandamás en el futbol quiere que la Copa del Mundo se dispute cada dos años y no cada cuatro. Me parece una absoluta locura que terminaría por agotar a los jugadores y, sobre todo, a los aficionados, que son los que realmente hacen de este deporte, juego y negocio algo increíble. El mundial era perfecto con 24 participantes y jugándolo cada cuatro años. No había que moverle nada. Ya aumentaron a 32 y ahora quieren hacerlo de 48. Más partidos, más publicidad estática, más derechos de televisión. Más, más y más.

Afortunadamente, hay gente más pensante y más inteligente. El señor Ceferin, quien es el máximo responsable de la UEFA, ya advirtió a la FIFA que si hace la Copa del Mundo cada dos, las selecciones europeas no van a participar.

Y si Europa no va, no hay Mundial. A veces más no es mejor, decía Ceferin y tiene toda la razón. En el Viejo Continente se juega el mejor futbol del mundo y están los mejores clubes, por lo cual, siempre hay que hacer caso y seguir su ejemplo. Es momento de jugar menos y hacerlo con más calidad. Hay que quitar la Copa Confederaciones, hay que quitar el Mundial de Clubes, hay que hacer menos torneos intrascendentes, hay que dejar que los entrenadores y los futbolistas tengan menos actividad para que, cuando salten a las canchas, veamos más calidad.

Me encanta el futbol, pero siento que estamos llegando al límite de tener partidos todos los días a todas horas. Eso cansa y los directivos no están midiendo las consecuencias. Por favor, señor Infantino, ponga las cosas en orden, deje de pensar locuras y póngase a trabajar para que este maravilloso deporte sea mejor y no peor. Basta de pensar solamente en ganar más dinero que el año pasado. Basta de reventar a los futbolistas. Basta de saturar a los aficionados. ¡Basta ya!

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