Hijo del último emperador austriaco fallece en México

CIUDAD DE MÉXICO, 11 de septiembre.- El pasado 6 de septiembre murió en la Ciudad de México el archiduque Félix Federico Augusto de Habsburgo y Lotaringia, príncipe imperial de Austria, príncipe real de Hungría y Bohemia, y sobrino nieto de Maximiliano de Habsburgo, segundo emperador de México (1864-1867).

Su padre era Carlos I de Austria y IV de Hungría, último emperador de Austria, quien a su vez fue sobrino de Francisco José I (esposo de la famosa emperatriz Sissi, a quien caracterizó la actriz Romy Schneider en el cine).

El 28 de junio de 1914, cuando asesinaron en Sarajevo a su también tío, Francisco Fernando, heredero a la corona (acto que daría inicio a la Primera Guerra Mundial), Carlos I ascendió al trono.

El archiduque Félix tenía sólo tres años cuando ocurrió la caída del imperio austrohúngaro, que llevaría a su familia a un exilio, primero en Suiza y Madeira (Portugal), donde moriría su padre, y luego en Bélgica.

Después él viviría en Estados Unidos y México. A diferencia de su hermano Otto, quien murió el 4 de julio de 2011 en Baviera (Alemania), Félix de Habsburgo nunca renunció a sus derechos al trono de Austria.

Como resultado de esta negativa, jamás pudo obtener el permiso para volver a su país, con excepción de una breve estancia de tres días en 1989 para asistir al funeral de su madre.

Después, en 1996, cuando la Unión Europea liberó sus fronteras, pudo entrar de manera ilegal desde Alemania. En esa ocasión, dio una conferencia de prensa, por lo que el gobierno austriaco le advirtió que si volvía a ingresar ilegalmente al país sería perseguido.

Finalmente se llegó a un acuerdo entre Félix, su hermano Carlos Luis y el gobierno austriaco, en el que los primeros declaraban lealtad a la República sin hacer referencia a sus derechos al trono y a su pertenencia a la familia imperial.

La historia de su familia no sólo es de realeza, también de santidad. Su madre, la princesa Zita de Borbón, fue una dama famosa por su devoción católica. Y el 3 de octubre de 2004 su padre fue beatificado en Roma por el propio Juan Pablo II.

El rey Carlos I es ampliamente recordado por su lucha por la paz durante la Primera Guerra Mundial.

Se sabe también que durante la época de peor hambre mandó matar a todos los caballos de la corte para dar de comer a la gente de Viena y dar leña hecha trozos de carrozas y muebles para que la gente pudiera calentarse durante el invierno.

A Carlos I lo sucedieron en el gobierno Tomás Masaryk, ya como presidente de Checoslovaquia; Mihay Károlyl, como presidente provisional de Hungría, y Karl Seitz, como presidente de Austria.

Durante su estancia en Estados Unidos, el archiduque fue asesor del presidente Roosevelt para tratar de contrarrestar la influencia de los nazis en el Ejército austriaco y como experto en la región tirolesa (los nazis habían puesto a los Habsburgo en la lista negra y los habían condenado a muerte).

En 1942 se unió al Ejército estadunidense en un batallón austriaco especial que fue disuelto poco después.

A fines de los años 40, el archiduque llegó a México donde se quedaría definitivamente. Se casó en 1952 con la princesa belga Ana de Arenberg y tuvo siete hijos: María del Pilar, Carlos Felipe, Kinga, Raimundo, Myriam, Esteban y Viridis.

El archiduque, a quien le gustaba visitar el Castillo de Chapultepec, murió a los 95 años, en su casa del barrio de San Ángel.

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